MENOS APOYO SOCIAL, PESE A LA PANDEMIA

*La administración de José Esquivel Vargas entregó, en 2020, la cantidad de 1 millón 192 mil 518.85 pesos de ayuda, mientras que en 2019 fue la ostentosa cifra de 4 millones 701 mil 781.70 pesos
*De acuerdo con los estados financieros presentados por el tesorero, Melchor Gómez Rivera, el total de gastos y otras pérdidas fue de 211 millones 808 mil 70.39 pesos durante el año pasado
*Es decir, el presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto entregará un ayuntamiento sin resultados y beneficios sociales como lo demuestra el estado de actividades financieras del municipio Redacción/Sol Quintana Roo/ Sol Campeche Felipe Carrillo Puerto.- Pese a que 2020 fue un año improductivo para el municipio, el presidente municipal José Esquivel Vargas tuvo más gasto general y lesionó las finanzas de su administración, pese a que durante este ciclo entregó menos apoyo social.
La administración de José Esquivel Vargas entregó, en 2020, la cantidad de 1 millón 192 mil 518.85 pesos de ayuda, mientras que en 2019 fue la ostentosa cifra de 4 millones 701 mil 781.70 pesos.
De acuerdo con los estados financieros presentados por el tesorero, Melchor Gómez Rivera, el total de gastos y otras pérdidas fue de 211 millones 808 mil 70.39 pesos durante el año pasado.
Es decir, el presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto entregará un ayuntamiento sin resultados y beneficios sociales como lo demuestra el estado de actividades financieras del municipio.
Es por esta razón, que el alcalde carrilloportense inició una serie de despidos y eliminación de una nómina interna que tenía inflada y en la cual se erogaban millones de pesos en favor de amigos, cómplices y medios de comunicación afines.
En ediciones pasadas, Sol Quintana Roo dio a conocer que el presidente municipal no sólo mantenía quebrado al Ayuntamiento por la toma de malas decisiones, sino que además se había dedicado a borrar la cultura maya, la misma que tanto presume, al abandonar los centros ceremoniales y a su gente.
Para el edil, su prioridad era mantener contentos a sus “socios”, prestanombres, familiares y “amistades” cercanas.
Algunas de ellas, que visita cotidianamente en la capital del Estado desde donde ahora gobierna, mismos que al no obtener la candidatura para una reelección, decidió a borrar de un tajo.
Por ese motivo, sus gastos municipales se habían incrementado, el dinero no rendía y mantenía un Felipe Carrillo Puerto quebrado y al borde del colapso económico y social.
Porque el perfil político dejó de existir desde su llegada a la presidencia municipal.
Hoy, el ayuntamiento de Felipe Carrillo Puerto presenta pasivos contingentes por 25 millones 269 mil 749.20 pesos emanados por demandas laborales, civiles y mercantiles que surgieron durante 2020, según los estados financieros en septiembre de ese año.
Para entender más la realidad del municipio, cabe mencionar que un pasivo contingente, en contabilidad, es una obligación surgida a raíz de sucesos pasados. Su existencia puede ser consecuencia de un suceso futuro, o que no está recogida en los libros por no obligar a la empresa a desprenderse de recursos o no ser susceptible de cuantificación en ese momento.
Ante la amenaza de tener problemas futuros con las autoridades, Esquivel Vargas inició una serie de artimañas para borrar cualquier “error” financiero de su administración y fue por esa razón que decidió cortar convenios.