LA COLUMNA JURÍDICA DEL SOL

LA CAPA Y EL DRAEF, LA CORRUPCIÓN QUE AFECTA AL QUINTANARROENSE Para enero del año 2021 la Dirección de Recuperación de Adeudos y Ejecución Fiscal (DRAEF) de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) se ha vuelto un área de difícil acceso, una atención poco humana y, sobre todo, falta de coherencia con lo que necesita la sociedad quintanarroense, resolver en beneficio de los que menos tienen y entender por lo que pasa el ciudadano, el empresario o cualquier persona que utiliza el servicio de agua potable, que a decir verdad, en el sur de Quintana Roo es algo deficiente, pero que se tiene que pagar mes con mes.
A pesar que hay personas que no utilizan el servicio como tal, los recibos llegan puntuales, en caso de que los meses subsiguientes no se cubran, estos no se van acumulando, para las prácticas gansteriles de la CAPA, al tercer mes empieza a duplicarse la deuda hasta tener cantidades estratosféricas, ahí es donde se tiene que acudir a la DRAEF, pues es el área jurídica que buscará la forma en que se le pague y por supuesto que hay gastos de ejecución y otros más con la finalidad de recuperar lo más que se pueda de un posible descuido.
Desde finales del año 2020 la DRAEF en Chetumal, no está funcionando adecuadamente a pesar que se instruyó desde el poder ejecutivo que se diera una buena atención a los quintanarroenses y se resuelvan sus problemáticas, pero para Carlos Alejandro Ortuño Fresán, esto no le es de gran interés, lo importante es seguir flotando en donde está, finalmente le quedan tan solo dos años a lo mucho.
En el DRAEF no hay quien resuelva, no hay quien entienda al ciudadano para apoyarlo en su problema, en atender el por qué los precios y sobre todo, los descuentos, al menos eso se tiene documentado en varios casos, donde al momento ni siquiera se puede entender la forma de cobrar las exorbitantes cuentas, pero que se puede esperar de un área que depende de uno de los nuevos ricos de Quintana Roo, Gerardo Mora Vallejo, quien sin duda, en caso de que en el cambio de gobierno se tenga un partido distinto al actual, se puede ver tras las rejas, al menos, bajo un proceso jurídico, incluso peor que el que le fincaron a Paula González. GERARDO MORA VALLEJO, LA CUENTAS QUE TENDRÁ QUE RENDIR El titular de la CAPA, Gerardo Mora, ha ejercido los recursos de la dependencia en el famoso carrusel financiero, ha licitado obras, asignado de manera directa y algunas otras bajo diversas modalidades, las cuales, se dice, cada una genera el famoso diezmo, si analizamos que la inversión por “CAPA” ha sido de más de mil millones, entonces tenemos que el diezmo, el cual no es de 10% si no de 15 o 20% cuando menos, pudiera ser que estamos ante uno de los nuevos ricos de Quintana Roo, pues ha generado cientos de millones al cochinito político, CAPA sigue siendo la caja chica.
Mora Vallejo desde la CAPA, piensa que no se ha documentado su paso por esta dependencia, hay que recordarle que cuando inicio fue víctima del robo de un millón de pesos, eso que solo tenía poco tiempo en la dependencia, imagínense ahora, sin duda, esta posición le otorga el beneficio económico y político para buscar otros espacios donde pueda seguir viviendo al nuevo nivel económico que tiene, por lo que no tarda en que de manera sorpresiva lo veamos como candidato en Cancún por el famoso PRD.
Recuerden que la CAPA es la responsable de haber agujereado toda la ciudad, si bien, hay inversión para cambio de tomas y tuberías, los pagos por este servicio, han venido de menos a más, por lo que tampoco se considera una súper estrategia la que realizan si tenemos que la dependencia por si sola tiene ingresos multimillonarios.
Las zanjas que han dejado las constructoras contratadas por la CAPA, no todas han sido cubiertas como se deben, los vicios ocultos están a la orden del día, un ejemplo claro lo tendremos en la costera de Bacalar, se ve que la inversión ahí está a todo lo que da, el problema es cuánto cobra CAPA a los empresarios, las molestias están a la orden del día, primero por la obra y la falta de coordinación, manejo y vialidad, después por cómo terminará y finalmente los costos para los empresarios, quienes de inicio ven que el colmillo de la CAPA no es nada pequeño.