HASTA HUACHICOLERO RESULTÓ DESCHAMPS (6/7 PARTES)

*Entre algunas de las denuncias que se han presentado en su contra, figura la de Miguel Arturo Flores, líder del movimiento Petroleros Activos en Acción por un México Nuevo, por enriquecimiento ilícito Redacción/Sol Quintana Roo/Sol Yucatán/Sol Campeche/La Opinión de México Ciudad de México.- A Romero Deschamps se le ha acusado de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita (lavado de dinero), defraudación fiscal, fraude, enriquecimiento ilícito, extorsión, malversación de recursos otorgados por PEMEX y amenazas cumplidas, sin faltar el robo de combustible e insumos, es decir “Huachicoleo”.
Entre algunas de las denuncias que se han presentado en su contra, figura la de Miguel Arturo Flores, líder del movimiento Petroleros Activos en Acción por un México Nuevo, por enriquecimiento ilícito.
También la de Sergio Carlos Morales Quintana, dirigente del Frente Nacional Petrolero, por administración fraudulenta y por no transparentar recursos.
Verónica Delgadillo y Samuel García, senadores del Movimiento Ciudadano, lo denunciaron por peculado, nepotismo, delincuencia organizada, robo de hidrocarburos, secuestro, enriquecimiento ilícito, venta de plazas, defraudación y evasión fiscal, así como por operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Al ser ungido como presidente Andrés Manuel López Obrador, y una vez transformada la Procuraduría General de la República en Fiscalía General de la República, con el doctor Alejandro Gertz Manero al frente, el 27 de diciembre de 2018, un contingente de trabajadores petroleros, cuestionaron al nuevo mandatario al que preguntaron qué iba a pasar con Carlos Romero Deschamps, a lo que AMLO respondió: “no vamos a tolerar a nadie, sea de alto nivel o trabajador sindicalizado”.
El arribo de López Obrador a la Presidencia y la pérdida de Romero Deschamps a su escaño en el Senado, en 2018, le significó quedarse sin el fuero que lo protegía y el otrora poderoso líder sindical quedaba en la mira de la justicia.
El primer aviso que recibió Romero Deschamps de que las cosas ya habían cambiado, fue el martes 9 de julio de 2019, cuando fue detenido su amigo y abogado Juan Collado Mocelo, representante legal también del ex presidente Carlos Salinas de Gortari y familia, así como también del ex mandatario, Enrique Peña Nieto.
Ese día el susto fue mayúsculo, pues ante la abrupta llegada de los agentes federales ministeriales al exclusivo restaurante, enclavado al sur de la Ciudad de México, el líder petrolero se tiró al piso y permaneció inmóvil, sin hacer movimiento alguno, hasta que uno de los agentes, en tono burlón, le dijo que no iban por él sino por su abogado.
Antes, el 27 de febrero, Sergio Morales, líder del Frente Nacional Petrolero, había interpuesto la denuncia contra Romero Deschamps por fraude a petroleros y por administración fraudulenta al frente del STPRM.