- Ingeniería Mantenimiento y Construcción de Candelaria S.A. de C.V., fue la gran apapachada durante los dos últimos trienios de Salvador Farías
- El exalcalde también está envuelto en cuentas pendientes ante las autoridades fiscalizadoras del Estado
- Su sobrino está empecinado en seguir las triquiñuelas del Clan Farías, pues la Asecam encontró que, no comprobó adecuadamente 544 mil 794 pesos
Redacción/Sol Campeche
(Segunda y última parte)
Campeche.– Durante los dos últimos trienios de Salvador Farías, Ingeniería Mantenimiento y Construcción de Candelaria S.A. de C.V., fue la gran apapachada, de acuerdo con la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), pues durante 2020 recibió un jugoso contrato por 2 millones 250 mil 26 pesos con 11 centavos.
Se trató del expediente HAC/DOP/BANOBRAS-019/2020, para la construcción de una cancha techada, con fecha del 24 de agosto de ese año.
Pero además, su representante Rene Villalobos Ruiz también ha recibido contratos, como el MCC-DDSFE-FAISM-VIV-2020-013, con un monto de 1 millón 771 mil 837.37 pesos para la construcción de cuartos dormitorios.
Y en 2019 el expediente HAC/DOP/FAISM-033/2019, por 1 millón 933 mil 739.72 pesos para la ampliación de la red eléctrica en la localidad de El Tulipán.
Convirtiéndose con ello este proveedor en uno de los más apapachados por ésta y la pasada administración de Candelaria.
“CHAVA FARÍAS”, EXPEDIENTE ABIERTO
Además de los señalamientos que lo vinculan con el narcotráfico y que han circulado en torno a él desde hace más de una década, el exalcalde Salvador Farías también está envuelto en cuentas pendientes ante las autoridades fiscalizadoras del estado.
De acuerdo con el último informe de la cuenta pública 2021 de la Auditoría Superior del Estado de Campeche (Asecam), el ex alcalde no justificó 1 millón 982 mil 410 pesos, además de haber un desvío por 1 millón 338 mil 794 pesos, por concepto de pago a cuenta de beneficiarios, que fue cobrado por solamente un servidor público.
Durante los últimos nueve meses de administración de Salvador Farías González al frente del municipio, no se erogó adecuadamente 2 millones 830 mil 410 pesos, lo que quiere decir que en cada uno de sus últimos 272 días gastó indebidamente 10 mil 405 pesos con 92 centavos, de los cuales gastó 313 mil 200 pesos por asesoría legal administrativa, pero sin documentación justificativa; igual que un millón 206 mil 94 pesos por concepto de “apoyos económicos”, tampoco sin respaldo que justifique el uso del recurso; así como de 50 mil 717 pesos gastados de recursos provenientes del Fondo de Fortalecimiento para la Inversión Pública Productiva del ejercicio fiscal 2021, cuya utilización tampoco está fundamentada.
Además, de enero a septiembre del 2021 fueron retirados más de un millón 206 mil 397 pesos que en primera instancia estaban etiquetados para hacer pagos de forma electrónica en el abono a la cuenta de beneficiarios; sin embargo, el recurso fue expedido en cheques a nombre de un funcionario, pero la documentación del dinero no existe.
Su sobrino está empecinado en seguir las triquiñuelas del Clan Farías, pues la Asecam encontró que, del 1 de octubre al 31 de diciembre del 2021, el nuevo alcalde Farías Bailón no comprobó adecuadamente 544 mil 794 pesos, de los cuales 280 mil fueron destinados a la compra de un vehículo a un particular, sin que en el proceso de adquisición haya sido garantizado en cuanto a precio, calidad, financiamiento, oportunidad, y también carece de documentación probatoria.
También, Farías Bailón hizo un pago de 132 mil 397 pesos provenientes del erario, por concepto de “apoyos económicos”, de los cuales tampoco hay papeles que acrediten el destino del recurso.
Al igual que su antecesor, expidió cheques por la suma de 132 mil 397 pesos, que no fueron pagados vía electrónica a los beneficiarios, y de nueva cuenta fueron emitidos a nombre de un servidor público; para no variar, sin pruebas del destino final del recurso.
Por todo ello, la Auditoría Superior de Campeche determinó que el Ayuntamiento de Candelaria no cumplió con las disposiciones de la Ley General de Contabilidad Gubernamental y ambos Farías están bajo la lupa.



